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A mi mundo, que seguramente no es diferente del tuyo. A mi forma de ver las cosas . A mi forma de intentar comunicar como veo las cosas.

domingo, junio 08, 2008

Ciclos

¿Quién fue que dijo "la vida me consume"? ¿o fue consumo?...
Correr. Esa es la palabra. Correr para marcar presencia. Correr para estar. No importan las condiciones en que estés, pero asegúrate de estar. Signos de nuestro tiempo...
Trabajo, mucho trabajo. Estudio, se me hace harto el estudio. Papá. También se me hace harto el ser papá. Pruebas de fin de semestre en el colegio. Mis hijos no quieren estudiar. No se los digo, pero lo adivinan; yo tampoco quiero hacerlo. El problema es que no me afectará a mí. Les afectará a ellos. Pero les confieso que no puedo. No tengo energías para poder ayudarles.
Estoy en eso. Intentando convencerme de que necesito convencerlos de hacer lo correcto.
¡Qué tema esto de hacer lo correcto ah!
¿Debo obligarlos? ¿Debo permitirles tomar sus propias decisiones? ¿a qué costo?
Los niños crecen. Pero crecen menos de prisa que mis dudas. Mis terribles, mis monstruosas dudas. Me imagino una boa constrictor. Mis dudas me ahogan. No me dejan respirar. Miro hacia todos lados buscando algo que me ayude, buscando una herramienta con la cual deshacerme de estas dudas. Pero es inútil. No logro zafarme. Me falta energía. Me falta visión...
Y sin embargo, recuerdo que el año pasado pasé por lo mismo. Y salimos adelante. Mis hijos siempre se las arreglan para salir airosos de sus desafíos. Es una señal. ¿Será una buena señal? Mis dudas son perseverantes conmigo...
Pero mis hermosos hijos serán mejores que yo. Esa es mi única certeza. Y la boa lo sabe también. Y en los instantes en que lo recuerda logra aflojar un poco la presión y logro llenar de aire nuevamente mis pulmones. Y así comenzará un nuevo ciclo. Que no será el mismo pero que pasará por etapas muy similares. Y en cada etapa creeré que no puedo más y en cada una de ellas, como en una película con final feliz pero abierto, recordaré mi única certeza con sólo mirarlos a los ojos y lograré llegar al próximo capítulo.
...
y pensar que cuando era joven jamás me percaté de esta situación en mis padres. Una vez más; muchas gracias queridos padres.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Querido amigo: leo tus palabras y siento la necesidad de decirte que si bien es un periodo de sobreexigencia que muchas veces te llena de angustia, lo positivo es que tienes la visión de darte cuenta de lo que te está pasando de modo que tienes la posibilidad de en primer lugar pedir consejos ó sentirte comprendido por muchos de nosotros que vivimos lo mismo, tal como tu bien lo mencionas " do the right think" ( hacer lo correcto¡¡¡) que dificil saber qué es lo correcto; muchas veces la sociedad nos impone esquemas o códigos de lo correcto; los padres nos dan sermones sobre lo correcto y cómo guiar nuestro actuar ( y eso que son personas igual que nosotros que también tienen sus temores, dudas y cometen errores), en fin no sé hacia donde quiero dirigir mis palabras ; solo quiero decirte que lo correcto es lo que tu corazón dicta en ese momento, salvaras cualquier escollo ó superarás las cargas si buscas en tu corazón y actuas siempre sabiendo que tu desición fue guiada por el sentimiento de amor y cariño hacia los demás incluyendote a ti mismo, es bueno sentirse bien con uno mismo y regalonearse , amarse, pero también es bueno no dejar guiar nuestras desiciones por el ego, que muchas veces nubla nuestro actuar porque nos dice que hacer desde el prisma de lo social, lo aceptado y resulta que en muchas ocaciones lo deseado y lo que nos colma nuestro corazón escapa a la lógica de lo establecido. Bueno,como sé que en el fondo es la excelencia, el querer superarte para tus seres querido lo que mueve tu accionar te aconsejo que te des una vuelta con tiempo y dedicación por tu camino interior y busques el descanso y fuerza que requieres en estos días puntuales para seguir siendo el pilar de excelencia y guía de los tuyos.
mano negra.