Claro...
Los amigos se van y te dejan con algun bonito desafío...
El martes recién pasado, y por razones de trabajo, se juntaron cerca de 400 personas en Espacio Riesco.
Ustedes no se imaginan lo que es llevar a cabo un evento como ese.
Aparte de sentirme orgulloso de que el evento resultó todo un éxito en términos de concurrencia, me hicieron sentir espectacular dos cosas;
La primera tiene que ver con el motivo de juntarnos. Era un lanzamiento, pero no un lanzamiento cualquiera. Estábamos lanzando al mercado un producto inventado y desarrollado en Chile para el resto del mundo. A ustedes les puede parecer una nimiedad, pero para mí, que soy parte interesada, lo reconozco, es la primera vez que me sucede.
Lo segundo tiene que ver con una de las conferencias de ese día; Tópicos sobre la identidad de la mujer del siglo XXI. Fue una enriquecedora charla sobre la diferencia de género y las diversas realidades de la mujer de hoy. El presentador, tan ameno como el tema, fue llevándonos hacia el tema como sin querer, con la suavidad de los contadores de cuentos pero transmitiendo en todo momento pequeñas certezas de la vida cotidiana.
Al final, conversando con otros asistentes, concordamos en que todos aprendieron algo. Todos se quedaron con algo de aquella exposición. Una bellísima persona del sexo femenino contaba al día siguiente que ella había llegado a su casa y le había dicho a su marido: "escúchame bien, desde hoy me especializaré, ya no seré la mujer hace todo, eso es muy desgastador".
Personalmente creo que no lo hará. Como tampoco pudieron hacerlo mi abnegada madre y mi espectacular esposa. Son demasiado espectaculares como para no brindarse enteras.
El problema no es todo lo que hacen, sino de que manera nos enseñan a hacerlas con ustedes.